A finales del año pasado, un poco conocido rapero llamado Kanye West se presentó a una audición en American Idol con su pareja embarazada que lo apoyaba.
Hizo lo mejor que pudo frente al panel de jueces repleto de estrellas que consistió en las cantantes Keith Urban, Jennifer Lopez y Harry Connick Jr. No hace falta decir que el Sr. West les impresionó por su capacidad de rapear mientras llevaba un par de zapatillas que parecían ser personalmente elaborado.