¿Pasar hambre después de hacer ejercicio te suena familiar? Bueno, la buena noticia es que no estás solo. Es común sentir mucha hambre después de hacer ejercicio..
El ejercicio tiende a quemar calorías usando su reserva de glucógeno, lo que aumenta su apetito.
El ejercicio también te deja deshidratado. Si no bebe suficiente agua antes, durante y después de un entrenamiento, se sentirá con más hambre. Además, no beber suficiente agua antes de un entrenamiento conduce a un aumento del hambre más tarde. Si prefiere hacer ejercicio mientras está en ayunas, terminará sintiéndose más hambriento..
Algunas veces, su apetito puede disminuir durante o justo después de hacer ejercicio, pero las hormonas del hambre pueden aumentar más tarde en el día, lo que hace que coma en exceso. Los niveles de hormona de la saciedad también tienden a disminuir, lo que dificulta que se sienta saciado..
Se ha encontrado que el ejercicio ayuda a mantener el peso y no a perder peso. También le ayuda a reducir la grasa abdominal y evitar enfermedades como la diabetes y problemas cardiovasculares. Aparte de esto, está obligado a vivir una vida más feliz y saludable..
No tienes que dejar de entrenar ya que es un hábito saludable. Lo que debe entender es que el ejercicio definitivamente aumentará su apetito y, por lo tanto, debe saber cómo lidiar con la situación. Hay diferentes circunstancias que te dan mucha hambre después de un entrenamiento, y estas incluyen:
• Niveles de glucógeno agotados
• Combustible inadecuado antes del entrenamiento
• El ejercicio tiende a aumentar el apetito.
• deshidratación
Cómo mantener a raya sus hambres:
Elija la comida correcta
Si comes un pedazo de pastel y lo tomas con un refresco después de un entrenamiento, siempre sentirás hambre. Los alimentos que están llenos de azúcares refinados y aditivos no le ofrecen la nutrición necesaria. Tienden a elevar sus niveles de azúcar en la sangre, haciéndole sentir hambre solo una hora después. Esto definitivamente llevará a meriendas poco saludables.
Es por esta razón que debes elegir el tipo correcto de refrigerio después de un entrenamiento. Dicho bocadillo debe ser rico en carbohidratos y proteínas para mantenerte satisfecho, así como también para ayudar en la recuperación muscular. Tales bocadillos incluyen mantequilla de maní con un plátano o atún o pavo magro acompañado de galletas integrales.
Si hace ejercicio después de una comida pequeña, cambie la rutina para que haga ejercicio después de las principales. Esto realmente ayuda, especialmente si tiendes a sentirte más hambriento después de un entrenamiento. Comer antes de un entrenamiento ayudará a mantener a raya el hambre, reduciendo así las posibilidades de comer los alimentos equivocados. Asegúrate de que la comida que comes después de una sesión de entrenamiento contenga suficientes calorías y nutrientes para mantenerte en movimiento.
Evalúe su esfuerzo
Si no hace ejercicio durante más de una hora, no es necesario aumentar su ingesta diaria de alimentos. Sin embargo, asegúrate de tener una comida completa después del entrenamiento que te ayude a repostar adecuadamente. El peor error que puedes cometer es salir corriendo con el estómago vacío. Siempre trabaje con un nutricionista antes de decidir hacer ejercicio con el estómago vacío si su único propósito es perder peso.
Programación de sus comidas
Mientras hace ejercicio, es muy importante programar sus comidas para que pueda mejorar el rendimiento y la recuperación. Ya que terminará agotando sus reservas de glucógeno a medida que hace ejercicio, es necesario reponerlas para que sea lo suficientemente fuerte como para entrenar al día siguiente..
Coma su comida inicial posterior al entrenamiento dentro de los próximos 30 a 60 minutos después del entrenamiento. Necesitará una planificación previa para que esto sea posible. Si es una persona temprana, tenga el desayuno listo y si tiende a hacer ejercicio a la hora del almuerzo, asegúrese de comer su almuerzo como su comida posterior al entrenamiento.
Si normalmente hace ejercicio a primera hora de la mañana, es importante consumir una comida posterior al entrenamiento dos horas después. El consumo de la mayoría de las calorías al comienzo del día ayudará a reducir los antojos que podrían surgir más adelante. Siempre debes comer el desayuno de un rey, el almuerzo de un príncipe y la cena de un pobre. Esto significa que el desayuno debe ser su comida principal del día..
Mantener hidratado
El hambre puede ser consecuencia de la deshidratación. Es común que la mayoría de las personas no beban suficiente agua antes, durante y después del ejercicio. Su cerebro confundirá su falta de líquidos con el hambre, lo que provocará los antojos.
Si tiene hambre solo una hora desde la última comida, debe intentar beber al menos 12 onzas de agua y luego esperar unos 15 minutos. Vuelva a evaluar su situación de hambre. Si desea mantenerse hidratado, comience a beber de 8 a 12 onzas una hora antes de un entrenamiento y al menos 24 onzas después del entrenamiento..
De esta manera, habrás consumido entre 2 y 3 litros de agua al final del día. Otros factores que afectan la cantidad de agua necesaria incluyen el embarazo, la enfermedad, el calor y la humedad. Para determinar si necesita otro vaso de agua, observe el color de su orina; claro a amarillo claro significa que está hidratado, cualquier cosa más oscura que la limonada significa que necesita rehidratarse.
Manténgase alejado de las trampas
Evite usar la excusa de recompensarse a sí mismo para excederse en todas las cosas incorrectas después del entrenamiento. Más tarde, esto hará de los alimentos una recompensa psicológica para usted una vez que complete un entrenamiento. Con tal mentalidad, no esperes perder peso. Mantenerse alejado de las comidas engañosas asegurará que no sufra dolores de hambre cada vez que entre a la casa desde el gimnasio..
Conozca los mínimos
Debe ser capaz de diferenciar entre el hambre intenso real de los antojos. El hambre severa puede presentarse a través de la falta de concentración, mareos, irritación extrema y sensación de sueño..
Si experimenta estos síntomas, el culpable podría ser la hipoglucemia, que se produce como consecuencia del agotamiento de los azúcares complejos..
Sin embargo, si tuvo una comida o bebida deportiva durante su entrenamiento, intente esperar al menos una hora para que comience la sensación de hambre. Esto no solo ayudará a evitar comer en exceso, sino que también evitará la sensación de que debe comer. Si se toma en serio sus entrenamientos, debe comer para acelerar su proceso de recuperación y alimentar su cuerpo. Esto evitará que los antojos de hambre te afecten..
Si sigue atentamente las pautas anteriores, podrá manejar mejor el hambre después del entrenamiento.