Es un hecho que sufrimos de un poco de síndrome de amapola alta aquí en Australia, por eso es que cuando la oficina de la oficina comienza a jactarse de su ascenso o aumento de sueldo, tendemos a sentirnos muy mal. Sin embargo, un estudio reciente sugiere que los celos de la carrera podrían ser buenos para ti.
La investigación muestra que la envidia maliciosa (cuando tienes sentimientos destructivos sobre los demás) en realidad no mejora el rendimiento. La envidia benigna (el tipo que estimula la auto-reflexión y la auto-mejora) es en realidad un motivador saludable y conduce a un mejor rendimiento..
Aparentemente, los celos que siente, ya sea por la satisfacción laboral de alguien o el cheque de pago, le dicen algo sobre lo que quiere y pueden convertirse en una herramienta para obtener lo que desea..
Así que no empieces a pegar la grapadora de tu viejo compañero en el escritorio con la esperanza de mejorar tu estado de ánimo, pero si dejas que tus celos te motiven, podrías estar pateando goles rápidamente..