Después de un duro día de caminata en las selvas de Islandia, no hay nada mejor que un elegante refugio de los elementos y una bebida caliente para descongelar su cuerpo. La bebida está en ti, pero el estudio de arquitectura con sede en Estocolmo Utopia Arkitekter ha diseñado el refugio.
Skýli, que significa "refugio" en islandés, es una cabina conceptual construida para soportar las condiciones climáticas extremas del paisaje montañoso de Islandia. La estructura combina cuatro formas piramidales distintivas que se asemejan a una carpa clásica o los techos de las chozas tradicionales islandesas. Los aguilones triangulares crean una estructura altamente duradera y estable que se destaca en el paisaje accidentado al tiempo que refleja sus formas características.
La cubierta exterior de Skýli está hecha de acero azul brillante que recuerda a la colorida arquitectura de viviendas urbanas de Reykjavik. Cuatro ventanas de piso a techo abren la cabina al escenario espectacular, asegurando que incluso cuando están protegidos en el interior, los visitantes nunca estén desconectados del paisaje.
"Skýli está diseñado para entornos prístinos donde el desarrollo sostenible es de la mayor importancia", explicó Mattias Litström, fundador y director creativo de Utopia Arkitekter. "Los materiales deben ser conscientes del medio ambiente y, al mismo tiempo, resistentes al clima extremo".
Desde el suelo hasta el techo agudo, Utopia Arkitekter refinó cada detalle. Skýli cuenta con cuatro áreas de actividades: una para cocinar, remendar y comunicarse, una para comer y guardar suministros de emergencia y dos para descansar y dormir. Los bancos se despliegan de las paredes para ser usados como camas y sofás, con capacidad para hasta 15 personas. Todos los accesorios están hechos a medida y diseñados para caber en paquetes planos para un fácil transporte.
La sostenibilidad fue una de las principales consideraciones para los diseñadores. Un panel solar y una batería proporcionan energía durante el tiempo con suficiente luz solar. En condiciones meteorológicas adversas, los dispositivos pueden alimentarse con un generador de manivela. El agua de lluvia que se recoge del techo se filtra en recipientes con drenaje automático en la cubierta exterior y se purifica. La calefacción es generada por las personas que habitan la cabaña. En caso de una emergencia, Skýli está equipado con suministros de alimentos, equipo médico básico y una lámpara de alerta roja montada en el techo..
Desafortunadamente para los entusiastas aventureros, el proyecto fue diseñado para una competencia y aún no está disponible para estancias fuera de la red. Sin embargo, ha sido nominado para un premio en el World Architecture Festival 2017, y con un poco de suerte pasará del concepto al alquiler de Airbnb extremo pronto..