En Cuba, no puedes deletrear 'ajedrez' sin 'che'

El impacto de Ernesto "Che" Guevara todavía se encuentra en toda Cuba (y en el mundo): la ideología, las camisetas ineludibles y el ajedrez que se enseña a la mayoría de los escolares cubanos. Hoy, el país celebra el 50 aniversario de la muerte del revolucionario con, entre otras cosas, un torneo de ajedrez en La Habana, inaugurado por el gran maestro cubano Silvino García..

Simultánea de #ajedrez CHE VIVE https://t.co/xfTh8y84LX pic.twitter.com/NmvcmF9AwR

- Cuba Olímpica (@CubaOlimpica) 7 de octubre de 2016

Nacido en Rosario, Argentina, en 1928, Ernesto Rafael Guevara de la Serna era hijo de un terrateniente argentino de ascendencia española e irlandesa. Aprendió a jugar al ajedrez con su padre y comenzó a jugar en torneos locales a los 12 años, y continuó sus estudios de medicina en la Universidad de Buenos Aires..

Su ardor revolucionario lo alejó del juego, pero volvió a él después de la revolución, en 1961, cuando se desempeñó como director del Banco Nacional y Ministro de Industrias. Una de sus primeras iniciativas fue relanzar el Memorial de Capablanca, un torneo anual de ajedrez que había sido interrumpido por un golpe de estado en 1952, y convertirlo en el torneo mejor pagado del mundo. La edición de 1965 del torneo pasó a la historia luego de que el Departamento de Estado de los Estados Unidos prohibiera a Bobby Fischer viajar al país. Terminó jugando por telex desde el Marshall Chess Club en Nueva York..

El propio Guevara era bastante bueno en el juego de los reyes. Se dice que jugó al gran maestro polaco-argentino Miguel Najdorf en un empate. Pero de acuerdo con las memorias de 1975 del gran maestro checoslovaco-alemán Luděk Pachman, Jaque mate en Praga: las memorias de un gran maestro Guevara deseaba poder dedicar más tiempo a la práctica. "Saben, camarada Pachman, no me gusta ser ministro", dijo. "Prefiero jugar al ajedrez como tú, o hacer una revolución en Venezuela".